1. Introducción
Los isquiosurales o isquiotibiales (comunmente conocidos) son un grupo muscular localizado en la parte posterior del muslo donde los músculos semitendinoso, semimembranoso y bíceps femoral, lo componen. Representan el 12% de las lesiones musculares, siendo la lesión muscular más frecuente principalmente en fútbol y deportes de velocidad.
El mecanismo lesional más típico suele ser de forma indirecta (sin un traumatismo o contacto directo) y con una contracción activa (contracción excéntrica) del músculo. Se trata de una lesión por estiramiento, en la que la fuerza de tensión que soporta el músculo es mayor a la resistencia que ofrece. En el momento en el que se produce, el jugador suele notar un “pinchazo” en la zona de la rotura. Según el grado y localización de esta, mostrará una mayor o menor impotencia funcional al caminar, al flexionar la rodilla o extender la cadera y al extender la rodilla o flexionar la cadera en un estiramiento.
2. Causas y diagnóstico
Como causas y/o factores predisponentes de una rotura muscular isquiosural, tenemos el acortamiento de la musculatura de la cadena posterior, la debilidad tanto de la propia musculatura, como de la musculatura estabilizadora lumbopélvica (transverso abdominal y glúteo medio principalmente), los desequilibrios entre musculatura agonista-antagonista, elevada tensión neural (del ciático), fatiga e hidratación, lesión/es previas, etc.
Los sistemas de clasificación y diagnóstico de este tipo de lesiones están en continua evolución (anatómicos, clínicos o radiológicos). Están basados en una anamnesis (historia clínica) y una exploración física. El uso de pruebas complementarias como la ecografía (tras 48h-72h de la lesión), altamente recomendada, o la resonancia magnética (tras 24h), facilitan conocer lo más rápido posible el grado de la lesión y el pronóstico de la misma.
El pronóstico y recuperación de la lesión vendrán determinados por todos los factores anteriormente mencionados, además del mecanismo lesional, el tamaño de la rotura y su localización.
3. Tratamiento
El tratamiento dependerá de la fase/etapa en la que nos encontremos dentro del proceso de recuperación. Siempre se deben respetar los tiempos biológicos de recuperación y
tener en cuenta los factores predisponentes que influyen en este tipo de lesión. Todo esto marcará los objetivos y tratamiento en cada fase de la recuperación:
4. Conclusión
La evaluación y supervisión, tanto durante como en las primeras semanas posteriores al
alta deportiva, resultan fundamentales para evitar recidivas o recaídas.
En F de fisioterapia disponemos de un equipo multidisciplinar de profesionales y medios técnicos para conseguir una recuperación completa y funcional de tu lesión, asegurándote una vuelta a tu deporte tras una correcta readaptación deportiva.